"Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó." Romanos 8.37
No es un tiempo para pelear o condenar, es tiempo de mostrar amor, verdad y los principios del Reino de Dios, los cuales no cambian con el pasar de las épocas.
Cada uno de nosotros tiene la misión de compartir, con otras personas, lo que Dios nos ha regalado. No podemos ser egoístas, tenemos que hablar y mostrar el amor de Dios con palabras y acciones concretas. Sólo así, el mundo entenderá, que la mejor decisión que podemos tomar, es entregarle nuestra vida a Él. Si te dejas usar por Dios, venciendo temores y complejos, te podrías convertir en la respuesta que alguien necesita escuchar.
No es un tiempo para pelear o condenar, es tiempo de mostrar amor, verdad y los principios del Reino de Dios, los cuales no cambian con el pasar de las épocas.
Cada uno de nosotros tiene la misión de compartir, con otras personas, lo que Dios nos ha regalado. No podemos ser egoístas, tenemos que hablar y mostrar el amor de Dios con palabras y acciones concretas. Sólo así, el mundo entenderá, que la mejor decisión que podemos tomar, es entregarle nuestra vida a Él. Si te dejas usar por Dios, venciendo temores y complejos, te podrías convertir en la respuesta que alguien necesita escuchar.
Quizás hoy estás pasando alguna tempestad en tu vida personal,
familiar, laboral, financiera o en tu salud. Las circunstancias te han
golpeado y has empezado a ver la vida con dolor, tristeza y
desesperanza. Alto!!!! Dios no está muerto, Él vive y tiene el poder
para cambiar tu realidad. Sólo tienes que entregarle tu vida y creer que Él es capaz de cambiar tu forma de pensar, sentir y actuar. Es su plan
que tengas vida y la tengas en abundancia.
No naciste para ser un fracasado, no eres un error! Eres alguien que nació con propósito y debes descubrirlo. Cómo? Preguntándole a Aquel que te creó para una misión especial. Cuando logres encontrarlo (a Dios, y cuál es su propósito para ti en esta vida) podrás vivir feliz.
Recuerda: si Dios está en tu barca, todo está bien! No temas: confía!
No naciste para ser un fracasado, no eres un error! Eres alguien que nació con propósito y debes descubrirlo. Cómo? Preguntándole a Aquel que te creó para una misión especial. Cuando logres encontrarlo (a Dios, y cuál es su propósito para ti en esta vida) podrás vivir feliz.
Recuerda: si Dios está en tu barca, todo está bien! No temas: confía!