"Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda al Señor.
Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Dios con agrado a Abel y a su ofrenda,
pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante." Génesis 4.3-5
La Biblia no dice por qué Dios rechazó el sacrificio de Caín. Quizás la actitud de Caín fue impropia, o quizás su ofrenda no estaba dentro de las normas de Dios. Proverbios 21.27 dice: "El sacrificio de los impíos es abominación; ¡Cuánto más ofreciéndolo con maldad!" Dios evalúa tanto nuestros motivos, como la calidad de lo que le ofrendamos.
Cuando entregamos algo a Dios o a los demás, nuestro corazón debe estar alegre por lo que podemos dar. No debemos preocuparnos por la cantidad, ya que todas las cosas pertenecen a Dios en primer lugar. Más bien démosle a Él, con gozo, nuestro mejor tiempo, dinero, posesiones y talentos!!!
Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Dios con agrado a Abel y a su ofrenda,
pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante." Génesis 4.3-5
La Biblia no dice por qué Dios rechazó el sacrificio de Caín. Quizás la actitud de Caín fue impropia, o quizás su ofrenda no estaba dentro de las normas de Dios. Proverbios 21.27 dice: "El sacrificio de los impíos es abominación; ¡Cuánto más ofreciéndolo con maldad!" Dios evalúa tanto nuestros motivos, como la calidad de lo que le ofrendamos.
Cuando entregamos algo a Dios o a los demás, nuestro corazón debe estar alegre por lo que podemos dar. No debemos preocuparnos por la cantidad, ya que todas las cosas pertenecen a Dios en primer lugar. Más bien démosle a Él, con gozo, nuestro mejor tiempo, dinero, posesiones y talentos!!!