"Y creció el niño, y fue destetado; e hizo Abraham gran banquete el día que fue destetado Isaac. Y vio Sara que el hijo de Agar la egipcia, el cual ésta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac. Por tanto, dijo a Abraham: Echa a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con Isaac: mi hijo. Este dicho pareció grave en gran manera a Abraham a causa de su hijo. Entonces dijo Dios a Abraham: No te parezca grave a causa del muchacho y de tu sierva; en todo lo que te dijere Sara, oye su voz, porque en Isaac te será llamada descendencia. Y también del hijo de la sierva haré una nación, porque es tu descendiente. Entonces Abraham se levantó muy de mañana, y tomó pan, y un odre de agua, y lo dio a Agar, poniéndolo sobre su hombro, y le entregó su muchacho, y la despidió.Y ella salió y anduvo errante por el desierto de Beerseba. Y le faltó el agua del odre, y echó al muchacho debajo de un arbusto. y se fue y se sentó enfrente, a distancia de un tiro de arco; porque decía: No veré cuando el muchacho muera. Y cuando ella se sentó enfrente, el muchacho alzó su voz y lloró. Y oyó Dios la voz del muchacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está. Levántate, alza al muchacho, y sostenlo con tu mano, porque yo haré de él una gran nación. Entonces Dios le abrió los ojos, y vio una fuente de agua, y dio de beber al muchacho. Y Dios estaba con el muchacho; y creció, y habitó en el desierto, y fue tirador de arco. Y habitó en el desierto de Parán; y su madre le tomó mujer de la tierra de Egipto." Génesis 21.8-21
Durante trece años, Abraham pensó que el nacimiento de Ismael (el hijo que le había dado Agar, la egipcia) era el cumplimiento de la promesa de Dios. Se sorprendió cuando escuchó a Dios decir que el hijo de la promesa nacería de él y Sara (ya ancianos). La preñez de Sara y el nacimiento de Isaac debieron haber tenido un impacto devastador en Ismael. Hasta ese entonces lo habían tratado como el heredero, pero esta llegada posterior (el nacimiento de Isaac) tornó su futuro incierto. Durante la celebración del destete de Isaac, Sara sorprendió a Ismael importunando a su medio hermano. Como resultado, Agar e Ismael fueron expulsados de la familia de Abraham.
No puede atribuírsele a Ismael la culpa de la mayor parte de lo que sucedió en estos primeros años de su vida. Se vio atrapado en un proceso mucho mayor que él mismo (se vio afectado profundamente por el conflicto entre dos mujeres celosas: Sara, quien a causa de la demora en tener descendencia, decidió tener un hijo por medio de otra mujer; Agar, que fue sumisa y se prestó para tal propósito, pero que al quedar encinta mostró sentimientos de superioridad ante Sara). En aquella tensa atmósfera nació y se crió Ismael.
Hay circunstancias que están fuera de nuestras manos. Pero, existen otras que sí lo están y sólo se trata de tomar las decisiones adecuadas, consultando al Señor para saber cuáles son. Ismael contaba con el Señor (vemos que Él responde a su clamor en el desierto). Promete a Abraham, no abandonarlo. Dios quería bendecirlo, de hecho vemos que hizo de él una gran nación. Si bien no sería el heredero de la promesa (el Salvador nacería de los descendientes de Isaac) podría haber llegado a ser canal de bendición para muchedumbre de gente, guiándola a adorar al único Dios verdadero, al cual él había conocido.
Que el Señor nos ayude a ver que Él quiere convertir circunstancias que en el presente parecen malas, en algo bueno para nuestras vidas. Confiemos siempre en Él. No dudemos, ni nos desviemos. El Señor nos ama y quiere bendecirnos!!!
Durante trece años, Abraham pensó que el nacimiento de Ismael (el hijo que le había dado Agar, la egipcia) era el cumplimiento de la promesa de Dios. Se sorprendió cuando escuchó a Dios decir que el hijo de la promesa nacería de él y Sara (ya ancianos). La preñez de Sara y el nacimiento de Isaac debieron haber tenido un impacto devastador en Ismael. Hasta ese entonces lo habían tratado como el heredero, pero esta llegada posterior (el nacimiento de Isaac) tornó su futuro incierto. Durante la celebración del destete de Isaac, Sara sorprendió a Ismael importunando a su medio hermano. Como resultado, Agar e Ismael fueron expulsados de la familia de Abraham.
No puede atribuírsele a Ismael la culpa de la mayor parte de lo que sucedió en estos primeros años de su vida. Se vio atrapado en un proceso mucho mayor que él mismo (se vio afectado profundamente por el conflicto entre dos mujeres celosas: Sara, quien a causa de la demora en tener descendencia, decidió tener un hijo por medio de otra mujer; Agar, que fue sumisa y se prestó para tal propósito, pero que al quedar encinta mostró sentimientos de superioridad ante Sara). En aquella tensa atmósfera nació y se crió Ismael.
Hay circunstancias que están fuera de nuestras manos. Pero, existen otras que sí lo están y sólo se trata de tomar las decisiones adecuadas, consultando al Señor para saber cuáles son. Ismael contaba con el Señor (vemos que Él responde a su clamor en el desierto). Promete a Abraham, no abandonarlo. Dios quería bendecirlo, de hecho vemos que hizo de él una gran nación. Si bien no sería el heredero de la promesa (el Salvador nacería de los descendientes de Isaac) podría haber llegado a ser canal de bendición para muchedumbre de gente, guiándola a adorar al único Dios verdadero, al cual él había conocido.
Que el Señor nos ayude a ver que Él quiere convertir circunstancias que en el presente parecen malas, en algo bueno para nuestras vidas. Confiemos siempre en Él. No dudemos, ni nos desviemos. El Señor nos ama y quiere bendecirnos!!!